Calor en la periferia: un desafío creciente

04 Aug 2024

Las olas de calor son un fenómeno meteorológico que cada vez afecta con más frecuencia e intensidad a todo el mundo, y las áreas urbanas no son una excepción. Sin embargo, existe una realidad invisible para muchos: las zonas periféricas de las ciudades, a menudo olvidadas en la planificación urbana, sufren las consecuencias del calor extremo con mayor crudeza.

Imaginemos por un momento un barrio en la periferia, alejado del centro de la ciudad y con grandes extensiones de asfalto, escasa vegetación y pocas zonas de sombra. Durante el día, el sol incide con fuerza sobre el pavimento y los edificios, creando un efecto conocido como isla de calor urbana. Este fenómeno provoca que la temperatura en estas áreas sea significativamente mayor que en las zonas más verdes y céntricas, llegando incluso a ser varios grados más alta.

Las personas que viven en la periferia, a menudo con menos recursos y acceso a infraestructuras como aire acondicionado o transporte público eficiente, se ven expuestas a un riesgo mayor de sufrir golpes de calor, deshidratación y otras enfermedades relacionadas con las altas temperaturas. Los niños, ancianos y personas con problemas de salud preexistentes son especialmente vulnerables a estos efectos.

A este problema se suma la falta de acceso a espacios verdes y zonas de esparcimiento con sombra en muchos barrios periféricos. La ausencia de árboles y vegetación no solo aumenta la sensación térmica, sino que también limita las opciones para refrescarse y socializar durante los días de calor extremo.

Abordar el problema del calor extremo en las zonas periféricas requiere un enfoque integral que combine soluciones a corto y largo plazo. Es fundamental implementar medidas para mitigar el efecto isla de calor urbana, como la creación de más espacios verdes, la instalación de pavimentos reflectantes que absorban menos calor y la promoción de la construcción de edificios con techos verdes.

Ventajas y desventajas de la situación actual

Ventajas	Desventajas
Mayor espacio disponible para viviendas a precios más accesibles.	Mayor exposición al calor extremo debido al efecto isla de calor urbana.
Menor densidad de población en comparación con el centro de la ciudad.	Menor acceso a infraestructuras como transporte público, áreas verdes y servicios de salud.

Mejores prácticas para mitigar el calor en la periferia

A continuación, se presentan algunas mejores prácticas que se pueden implementar para combatir el calor en las zonas periféricas:

Creación de espacios verdes: Plantar árboles y crear parques en barrios periféricos ayuda a reducir la temperatura ambiente y proporciona zonas de sombra para los residentes.
Instalación de pavimentos reflectantes: Utilizar materiales de construcción que reflejen la luz solar en lugar de absorberla puede disminuir la temperatura del pavimento y reducir el efecto isla de calor.
Promoción de techos verdes: Incentivar la construcción de edificios con techos verdes ayuda a aislar las viviendas del calor y reduce la temperatura general del entorno.
Mejora del transporte público: Un sistema de transporte público eficiente y accesible permite a los residentes desplazarse sin necesidad de utilizar vehículos privados, lo que reduce las emisiones de gases de efecto invernadero y la contaminación del aire.
Campañas de concienciación ciudadana: Es importante informar a la población sobre los riesgos del calor extremo y las medidas que pueden tomar para protegerse, como beber mucha agua, evitar la exposición al sol en las horas centrales del día y utilizar ropa ligera y de colores claros.

Preguntas frecuentes

1. ¿Por qué hace más calor en la periferia que en el centro de la ciudad?

El efecto isla de calor urbana es el principal responsable de las diferencias de temperatura entre el centro y la periferia. La falta de vegetación, la abundancia de asfalto y la concentración de edificios en las zonas periféricas contribuyen a que se acumule más calor.

2. ¿Quiénes son los más afectados por el calor extremo en la periferia?

Los niños, los ancianos y las personas con problemas de salud preexistentes son más vulnerables a las altas temperaturas. También se ven afectadas las personas con menos recursos económicos, que no pueden permitirse el lujo de tener aire acondicionado o de desplazarse a zonas más frescas.

3. ¿Qué puedo hacer para protegerme del calor en casa?

Mantén tu casa fresca cerrando las persianas o cortinas durante el día, ventilando por la noche y utilizando ventiladores o aire acondicionado si es posible. También es importante beber mucha agua y evitar la actividad física intensa durante las horas de más calor.

4. ¿Qué medidas pueden tomar las autoridades para combatir el calor en la periferia?

Las autoridades pueden implementar medidas como la creación de espacios verdes, la instalación de pavimentos reflectantes, la promoción de techos verdes, la mejora del transporte público y la puesta en marcha de campañas de concienciación ciudadana.

5. ¿Qué puedo hacer para contribuir a la solución?

Puedes contribuir plantando árboles en tu comunidad, utilizando menos el coche y optando por medios de transporte sostenibles, y concienciando a tu entorno sobre la importancia de combatir el cambio climático.

6. ¿Existen ejemplos de ciudades que estén implementando soluciones exitosas?

Sí, ciudades como París, Berlín o Medellín han puesto en marcha planes integrales para combatir el calor extremo en sus áreas urbanas, con un enfoque especial en las zonas periféricas. Estas ciudades están creando más espacios verdes, mejorando el transporte público y promoviendo la construcción de edificios sostenibles.

7. ¿Qué pasará si no se toman medidas para abordar el problema?

Si no se toman medidas, el calor extremo seguirá afectando cada vez a más personas, especialmente en las zonas periféricas. Esto tendrá consecuencias negativas para la salud pública, la economía y la calidad de vida de los ciudadanos.

8. ¿Dónde puedo encontrar más información sobre el tema?

Puedes encontrar más información sobre el calor extremo y las medidas para combatirlo en las páginas web de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el Ministerio de Sanidad o el Ayuntamiento de tu ciudad.

El calor extremo en la periferia de las ciudades es un problema complejo que requiere la colaboración de todos los actores implicados. Desde las administraciones públicas hasta los ciudadanos, pasando por las empresas y las organizaciones sociales, todos tenemos un papel que desempeñar para crear ciudades más resilientes y habitables frente al cambio climático. Es fundamental actuar con urgencia para mitigar los efectos del calor extremo en las zonas más vulnerables, garantizando el derecho de todos a una vivienda digna, un entorno saludable y una ciudad justa e inclusiva.